El murmullo del agua que brota de mil y una fuentes, y corre por las acequias… dulce frescor de los vergeles, explosiones del color verde de las palmeras cargadas de grandes dátiles: Túnez es un universo mágico. Y tras las últimas reformas políticas del pasado mes de Enero, también es libre, abierto a todo tipo de comunicación, red social, grupo social, tipo de turismo sectorial… en definitiva, democracia con todas sus letras, no una democracia encubierta, difuminada, sino una democracia libre, plural, el origen de la nueva corriente ideológica de los países árabes.
Porque Túnez es la tranquilidad absoluta, sensación paradisíaca con vistas a jardines de ensueño, a mares brillantes, donde la paciencia de las personas ha hecho posible que la vida se abra paso en el desierto. Pero, en Túnez todo son contrastes. Podemos bañarnos plácidamente en las playas de Hammameth, de la isla de Djerba, pero también disfrutar de la aventura en Tozeur, en Nefta.
Ahora es el momento ideal para descubrir Túnez, si nunca se ha visitado, o para volver a un sitio donde los paisajes de película, donde las gentes acogedoras, las costumbres más variopintas, las festividades más coloridas se hacen realidad.
A dos horas en avión de España, Túnez ofrece un clima familiar y cercano, gracias a una arraigada tradición en el sector turístico. No obstante, cerca de 400.000 personas trabajan directamente en la industria turística, cifra que se eleva al doble si contamos todos los demás sectores económicos que, de una manera u otra, guardan cierta relación con turismo y ocio.
Un país que cuida con mimo a sus visitantes, con un trato personalizado, individual, una bienvenida constante, ofreciéndoles opciones para todos los gustos y bolsillos. Siguiendo la tónica anterior, el 7% del PIB tunecino proviene de los ingresos generados por el turismo, un 14% si contamos las demás industrias relacionadas.
Recordar en este contexto, que de un total de 3.150 empresas extranjeras que operan en Túnez, sólo 33 (o 2.400 puestos de trabajo) cesaron sus actividades durante el cambio político de principios de Enero, y que la gran mayoría ha recuperado su ritmo normal después de ciertas interrupciones o perturbaciones de su negocio en los primeros días del proceso.
Por lo tanto, estas cifras son la prueba más palpable de que el turismo es uno de los bienes preciados de Túnez, y si antes lo defendían, lo potenciaban al máximo, ahora con la nueva situación política y estamental, más aún.
CONSEJOS PARA VISITAR TÚNEZ
Durante los últimos años, Túnez se ha convertido en referencia obligada en el turismo mediterráneo. Es, probablemente, el destino preferido de muchos viajeros para conocer el Magreb. En la actualidad es un país seguro y hospitalario. Sus gentes están encantadas de recibir una cantidad cada vez mayor de turistas y el Gobierno lo entiende como una forma de abrirse al mundo, de dar a conocer la nueva situación política y social de Túnez.
¿Cómo llegar?
La mejor opción desde España es el avión. La compañía tunecina Tunisair realiza vuelos de forma regular, todos los días de la semana, a la capital del país desde Madrid, Barcelona y, a partir de junio/julio, Bilbao.
La mayoría de las compañías aéreas europeas también cuentan con rutas directas a Túnez y no es difícil encontrar buenas ofertas en líneas “low-cost”, más ahora que las promociones son abundantes para volver a la senda de la normalidad de precios.
Otra forma de llegar a Túnez es con barco. Puede ser una buena opción si queremos llevar el coche, o disponemos de más tiempo. Existen combinaciones de ferrys para pasajeros desde Marsella y Génova.
Papeleo de entrada y salida del país:
Es necesario el pasaporte. Para ciudadanos de la Unión Europea no es necesario visado, a menos que se espere superar los tres meses.
Las aduanas tienen los procedimientos habituales, y se pueden introducir objetos personales habituales. Los animales de compañía deben ir con su cartilla de vacunación.
Horarios y festivos:
La hora tunecina es la misma que en España peninsular (GMT+1), aunque no se realiza el cambio de horario en verano.
Los días de descanso son el viernes por la tarde (como en casi todos los países de mayoría musulmana), sábados y domingos.
Festividades más importantes: 1 de Enero (Año Nuevo); 20 de Marzo (Fiesta de la Independencia); 21 de Marzo (Fiesta de la Juventud); 9 de Abril (Día de los Mártires); 1 de Mayo (Fiesta del Trabajo); 25 de Julio (Día de la Republica); 7 de Noviembre (Llegada al poder del presidente Ben Alí);
Fiestas religiosas (calendario no fijo); Año nuevo musulmán; Nacimiento del Profeta; Fiesta del Sacrificio (2 días); Fin del Ramadán
Clima:
La climatología en Túnez es muy diferente según la zona en la que estemos situados. Las playas y zonas cercanas gozan de la suavidad y calidez del clima Mediterráneo, sin cambios bruscos de temperatura.
En el interior del país, las formaciones montañosas favorecen la aparición de precipitaciones más abundantes y temperaturas más bajas.
En las ciudades del sur, sobre todo en época estival, el calor y el viento del desierto pueden ser un problema. Es recomendable llevar un pañuelo para cubrirnos el rostro en días de polvo.
Si nuestro destino son las playas, viajar de Junio a Septiembre nos asegurará días de sol y calor. Si pretendemos realizar un viaje por el país es recomendable escoger estaciones más templadas como la Primavera o el Otoño.
Transporte y comunicaciones:
Las carreteras de Túnez son aceptablemente buenas. Cuenta con pocas autovías pero su red principal está bien conservada.
La parte sur del país puede visitarse con un tour contratado con antelación, pero si pretendemos adentrarnos en el desierto, o en regiones montañosas, es aconsejable llevar vehículos todoterrenos bien equipados.
Las gasolineras son abundantes El transporte ferroviario comunica la capital con las principales ciudades, y también cuenta con un cercanías que recorre la costa. La capital cuenta con metro, que comunica los principales barrios. Su uso es seguro y recomendable.
Es sencillo coger un taxi en las ciudades. Existen dos tipos: normales, de color amarillo, que no cogen más de tres pasajeros y llevan taxímetro. Los colectivos son para transporte entre ciudades y es necesario llegar a un acuerdo con el conductor (es recomendable regatear un poco, el primer precio suele ser excesivo).
Las posibilidades de comunicación son las mismas que en cualquier país Europeo, aunque algo mas caras. La mayoría de los hoteles cuenta con posibilidad de conectarse a Internet.
Moneda:
La moneda de curso legal es el dólar tunecino. Esta dividida en 1000 millimes. Si entramos en el país con una cantidad superior a los 1000$ es necesaria una declaración de bienes.
La mayoría de establecimientos admiten pago con tarjeta, y existe una red de cajeros automáticos extensa.
Precauciones sanitarias:
No es necesaria ninguna precaución especial antes de viajar a Túnez. Es aconsejable (aunque no estrictamente necesario) beber agua embotellada y tener cuidado con las bebidas con hielo, zumos caseros y, en general, comida de puestos callejeros.
Lugares que no te puedes perder:
- El Djem:
Con su gran anfiteatro romano, el tercero más grande del mundo. Declarado Patrimonio de la Humanidad, es un espacio que se reservaba para actividades deportivas y luchas de gladiadores. Mide 427 metros de perímetro y cuenta con una capacidad para cerca de 30.000 personas. También se la puede conocer por ser el escenario de una marca deportiva en la que salían jugadores como Eric Cantona o Luis Figo.
En verano se transforma en escenario para artistas internacionales que actúan en el marco del festival Internacional de Música Sinfónica (Julio-Agosto).
- Túnez y la salud corporal: